PEJERREYES DE LOS BUENOS EN TRES LAGUNAS TOP DE LA PROVINCIA

Pese al intenso frío que viene marcando el comportamiento de la especie y que complica mucho la pesca, durante los últimos días hay tres lagunas de la provincia de Buenos Aires que han dado la nota, por la captura en cantidad de ejemplares de muy buen porte. Se trata de La Tigra (Tres Arroyos), La Reserva (antes "de la Rueda", en San Cayetano) y Los Manantiales (Coronel Dorrego), a la que acudieron varios pescadores deportivos atraídos por esos grandes pejerreyes, aún cuando los costos son cada vez más altos.

En primer término, visitamos laguna La Tigra, muy cerca de Tres Arroyos, un ámbito cercano a las 400 hectáreas y con excelente profundidad que asegura un promisorio futuro, en tiempos donde los escasos niveles hídricos son una preocupación. Embarcamos en un bote que nos entregó Martín, el propietario de campo Zubillaga, y navegamos en dirección a la zona de las barrancas, a unos 300 metros de la orilla, en un sector que tiene alrededor de 4 mts de profundidad.

Allí, con aparejos de flote o chiripá, dimos con muy buen pique de ejemplares de 30 a 38 cm, encarnando con mojarra viva natural y dando buenos piques los intentos con carnadas coloreadas de amarillo, ya sea los filet de dientudo, pejerrey o la misma mojarra, previamente salada.

El viento soplaba intenso y eso nos llevó a buscar puntos más reparados, detrás de la península y frente a la RP 85. Allí, la profundidad ronda los 1,50 mts y el pique fue exclusivamente con líneas de flote, con bajadas de 30 a 50 cm. Capturas de piezas de similares portes, muy robustos y peleadores, incluso con algún doblete. Aunque los de kilo están, nosotros no pudimos dar con ellos, pero se dieron tanto de costa como embarcados en los días previos, con ejemplares que oscilaron el kilo a kilo ochocientos.

En el caso de La Tigra, la pesca es muy rendidora desde la orilla, con un costo de $1000 y desde embarcaciones, se abona un ingreso de $2000 por pescador y alrededor de $2000 por el alquiler de un bote. Hay servicios de guía en la laguna, Pablo Bugni (Tel.: 2364 557625) y Gastón Zucco (Tel.: 2983 694674), quienes conocen como la palma de su mano el ámbito y nos achican la posibilidad de fallar, aunque el pique es muy bueno si lo encontramos, cosa que no es muy difícil, siempre y cuando haya sol y un poco de viento.

Otro destino que está dando que hablar en este centro sudeste bonaerense es La Reserva, en otros tiempos conocida como “la de Rueda”, en el corazón matunguero de lagunas que distingue a la localidad de San Cayetano, un distrito que sufre la sequía y tiene espejos muy destacados fuera del circuito cañófilo, caso laguna del Sol, muy castigada por la seca. Aquí, en La Reserva, el pique es muy bueno de piezas que van de los 600 a 900 gramos, con muchos ejemplares que sobrepasan el kilo de peso.

Se los venía pescando con páter y también a flote, con momentos en los que el peje está acardumado y la cuota se realiza en pocas horas. Hay guías también que operan en la laguna. La pesca de costa viene siendo bastante esquiva, aunque los más conocedores se hacen de una cuota de grandes ejemplares. El ingreso es de $3000 por pescador para la pesca aguas adentro, no hay botes en alquiler y el cupo es de 20 piezas. A estar atentos: sólo entran cuatro botes en la laguna.

Por último Los Manantiales, un espejo que oficialmente no se habilitó, pero ya están ingresando amigos de la región. Se ubica en cercanías de Coronel Dorrego, muy cerca de los pueblos de Faro y Gil, pasando Tres Arroyos. El ingreso embarcado se hace en el tracker del propietario, tiene un costo de $4500 por pescador y la pesca de costa se estima que sería con un valor de $2000 por barba.

Tanto la barra de El Matungo, comercio del ramo de Tandil, como nuestro amigo Adrián Quinteros metieron excelentes resultados. Pique de pejerreyes que van de los 400 a 800 gramos, y muchos que superan el kilo. El pique es muy intenso, se da a flote la cantidad y los “termos” los meten con el tradicional “Petete”, muy usado en La Brava u otros destinos profundos de la zona. La laguna estuvo mucho tiempo cerrada, bien cuidada y se fijó una cuota de 35 piezas por pescador.