EXCELENTE PESCA DE CORVINA NEGRA EN LA PIEDRA DE LOS VIDALEROS

Este sector tradicional de la costa marchiquitense dio la nota las últimas semanas, donde varios pescadores oriundos de Tandil lograron ejemplares de excelente porte. Aunque la mayoría de ellos salieron en la modalidad fondeada, también hubo muy buenas respuestas a tiro de caña. Por caso, una de las corvinas registró 17 kilogramos de peso. La carnada que mejor funcionó fue el cangrejo de mar, extraído en el mismo sector, cuando baja la marea.

La pesca deportiva de las Pogonias Cromis, más conocidas como corvinas negras, es una de las que conforman el Grand Slam de especies que podemos capturar desde la costa de nuestro litoral marítimo. Al igual que los lenguados y tiburones, requieren de técnicas específicas y motiva a pescadores exigentes a mejorar en búsqueda de dar con ellas, un esfuerzo que se justifica cuando se clava un ejemplar.

Walter y Ezequiel Vélez, de la ciudad de Tandil, acompañados de Pedro Olivera, de la localidad de San Manuel, vienen metiendo grandes capturas de corvinas negras en el sector de Piedra de los Vidaleros, una zona en donde un vestigio del macizo de Tandilia aflora a unos 150 metros de la costa ofreciendo un fondo rocoso donde se crían crustáceos que son el alimento favorito de la especie buscada. El sector elegido es a unos mil metros hacia el Sur de Mar Chiquita, tomando como referencia la última calle asfaltada.

La carnada para la negra la obtienen en el mar, en bajante, donde encuentran el cangrejo colorado en los pozones de piedra. Con él, dieron con grandes piezas que fueron de los 8 a los 17 kilos, con la sorpresa de un pique muy sostenido en los últimos días, algo anormal para estos años, ya que de meter dos o tres por días, hubo jornadas que lograron alrededor de 10 capturas, tanto con aparejos fondeados como también, a tiro de caña.